Gabriel Sanllehi, exalumno USM y actual CEO de BeLoop, cuenta su experiencia con la creación de este emprendimiento basado en la economía circular que actualmente desarrolla “Circula M”, software de medición para calcular el impacto y el ciclo de vida de envases.
Por María José Aragonés G. | Periodista Dirección General de Investigación, Innovación y Emprendimiento .
Envases y embalajes se han señalado como uno de los productos prioritarios por la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP), que obliga a los principales productores a organizar y financiar la gestión de residuos derivados de su comercialización. A casi 8 años de la promulgación de esta normativa, BeLoop tiene tremendas oportunidades para apoyar este proceso.
La empresa científico-tecnológica se enfoca en rediseñar envases y embalajes para apoyar a la industria en el cumplimiento de estándares y normativas para alcanzar la excelencia en sostenibilidad. De esta forma, sus soluciones van desde apoyo en la implementación de la Ley REP, hasta la formación de profesionales para la adopción de nuevas prácticas de sostenibilidad. Gracias a este trabajo han logrado colaboraciones con empresas tales como Marley Coffee, Laboratorio Chile, Freemet, Liola, Up Foods (Bagán), entre otras.
No obstante, uno de los principales enfoques de Gabriel Sanllehi y su equipo- conformado por Darlyn Riquelme, cofundadora y actual gerente de Administración, y Patricio Cabrera, director Técnico- es facilitar la toma de decisiones de las empresas con datos concretos de su producción y su impacto en el medioambiente. Es así como surge uno de sus actuales desafíos con la creación de un ecosistema digital que permita mejorar la gestión ecológica de los productos con un software compuesto actualmente de dos módulos: “Circula M” que permite la medición del impacto ambiental del packaging de los productos; y “Circula D” para generar diagnósticos sobre el estado de cumplimiento de la Ley Rep.
Al respecto, el CEO explica que Circula M se ha piloteado en Chile con excelentes resultados, ya que dicha medición considera desde que se extraen, producen, transportan y disponen los materiales de envases y embalajes: “este software es de suscripción anual para las empresas que venden productos de consumo masivo, tales como alimentos, detergentes o cosméticos. Y actúa como un gestor de productos circulares, ya que analiza diferentes métricas para conocer su impacto ambiental. Con este inventario de productos podemos acelerar el ecodiseño, velando por el cumplimiento de la ley, pero también buscando ahorros en costos y al mismo tiempo bajar su huella”.
La maduración de este emprendimiento ha sido posible gracias al apoyo de diferentes entidades nacionales e internacionales, como Startup Chile, la Universidad Técnica Federico Santa María, CORFO a través del Instituto para la Innovación Empresarial (3IE), Know Hub Chile, UC Riverside, Halcyon, 4thsi (4th Sector Innovations), por mencionar algunos.
La trayectoria de Gabriel Sanllehi con temas de emprendimiento de base científico-tecnológica tuvo lugar en distintos espacios de la universidad. En esta línea, pudo participar de varias iniciativas de la Dirección de Innovación y Emprendimiento USM, entre ellas el Semillero, programa de preincubación donde fue tomando forma BeLoop, y posteriormente, participó del Instituto Internacional para la Innovación Empresarial (3iE), incubadora de la USM, desde el año 2021. “El Semillero fue una experiencia súper enriquecedora. Normalmente en la universidad no tenemos este componente de emprendimiento, sobre todo en las carreras que están alejadas de la ingeniería comercial o industrial, los profesores te forman para entrar a la gran industria. El Semillero promueve esta nueva mentalidad de negocios, de cómo disponer nuestra profesión hacia algún tipo de negocio personal”, cuenta el ingeniero en Mecánica Industrial.
Durante el año 2014, cofundó una cooperativa que elaboraba libros liberados de derechos de autor utilizando materiales más ecológicos, para luego incorporarse al equipo de Valpaper, emprendimiento focalizado en la creación de materiales más sustentables para la construcción de viviendas sociales. Adicionalmente, en 2019, el ingeniero trabajó en Laboratorio Sustentable Natural (LABSUN), un spin off de la universidad, dedicado a la fabricación de productos ecológicos, donde Gabriel se enfocó en el desarrollo de bioplásticos reforzados a partir de residuos agroforestales.
“Gracias a estas experiencias en distintos proyectos de materiales en economía circular, entendí que era súper importante generar cálculos, data, análisis, para saber realmente qué material es más sustentable”, explica el CEO en relación a los factores que lo llevaron a desarrollar este nuevo ecosistema digital para la medición de impactos medioambientales.
Adicionalmente, hace un fuerte hincapié en la importancia de tener un rol más protagónico en la creación de innovación con problemas reales a nivel nacional: “Es muy importante el cambio en nosotros como ciudadanos, como personas, no solamente como consumidores, sino que somos creadores y gestores de soluciones para resolver los desafíos que enfrenta la sociedad desde todos los ámbitos, ambiental, económico, político, etc.”.